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Josef Albers y su inmenso homenaje al humilde cuadrado
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Josef Albers y su inmenso homenaje al humilde cuadrado

Por José Catalán Deus
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jcdeustelefonicanet/6/6/17
lunes 31 de marzo de 2014, 01:00h

Arquetipo del pintor intelectual centroeuropeo de entreguerras, este señor se fue de Alemania cuando el nacionalsocialismo ganó las elecciones y quince años mayor que Mark Rotchko, fue en buena medida su maestro. Josef Albers: medios mínimos, efecto máximo es su primera retrospectiva en España, medio siglo después de la que le dedicará el MoMa al morir. Toda una inmersión en el arte abstracto, estuvo las tres ltimas décadas de su vida -de 1888 a 1976- pintando cientos de veces formas cuadradas y nada más que formas cuadradas. Su galaxia multicolor de Homenaje al Cuadrado an impresiona, an plantea preguntas, an proporciona respuestas.

Tras ser alumno y profesor en la Bahaus, fue contratado por la Black Mountain College, el generador de artistas innovadores al otro lado del charco. Robert Rauschenberg, Cy Twombley, y Mark Rothko puede ser considerado alumnos suyos. Le preocupaba una cosa más que nada: el color. Cómo lo veíamos, cómo se formaba. El color y su circunstancia. En su descomunal y obsesivo Homenaje al cuadrado intentó explorar la interacción del color en un formato regular dado. Y demostró por si hiciera falta, que el color es un fenómeno completamente relativo; los colores se cambian constantemente segn su yuxtaposición y relación con otros colores. Un mismo tono puede parecer diferente cuando se coloca sobre diferentes fondos, y diferentes colores pueden parecer casi iguales cuando se asocian a distintos fondos. Es así que un mismo color permite innumerables lecturas.

Como profundo intelectual que era, escribía también, y escribía muy bien. En su poema Sobre mi pintura, decía: Cuando pinto / pienso y veo / ante todo -color / pero color como movimiento. / Color que no sólo acompaña / a la forma de extensión lateral / y que después de ser desplazado / permanece suspendido. / Sino movimiento interior perpetuo / como agresión hacia y desde el espectador- / además de interacción e interdependencia / con forma y tono y luz. / En un enfoque directo y frontal / o cuando se siente cerca / como una respiración y latiendo / -desde dentro.

Pues bien, razones suficientes para comprobar en la prácrtica si tanta teorìa se acomoda con la práctica. Compuesta por unas 80 pinturas -óleo sobre tablero prensado, nunca lienzo- amén de otras piezas mobiliario, objetos, fotografías y diverso material documental la muestra es plasmación de la colaboración de la Fundación con la The Josef and Anni Albers Foundation (Bethany, Connecticut), el lugar que se encarga de conservar la memoria de este buen señor que nos decía: Por qué prefiero el arte abstracto: Abstraer es la función esencial del espíritu humano. El arte abstracto es el más puro y se afana en lo espiritual intensamente. El arte abstracto es arte en su génesis y es el arte del futuro.

Un proyecto tan coherente y tan dirigido por una decidida voluntad de simplicidad, por el uso productivo de medios y recursos intencionadamente limitados, por el respeto al trabajo manual y por el énfasis en la experimentación con el color, que sigue admirándonos, que ha creado una obra de alto contenido poético y espiritual. Muy actual antídoto en este mundo consumista, de derroche y desenfreno.

El catálogo que acompaña a la exposición aporta una amplia sección documental con 57 textos de Josef Albers 26 de ellos absolutamente inéditos de los que 53 han sido traducidos al castellano por primera vez desde sus originales inéditos o publicados en alemán o en inglés, además de 14 testimonios de colegas, estudiosos, historiadores, ensayistas y escritores, todos ellos salvo uno inéditos hasta ahora en castellano. Y los de su autoría -segn nos los presentan- testimonian que la peculiar economía que regula la creación artística de Albers domina también su reflexión teórica y sus ideas en torno a la docencia y la práctica del arte y del diseño: el lector observará cómo en los textos preparados y escritos por Josef Albers entre 1924 y 1966 aparecen por doquier las mismas ideas (o muy parecidas), las mismas convicciones, arraigadas y contrastadas en su visión del mundo y su experiencia de la vida. Pero no hay aquí repetición ni mero aprovechamiento, sino más bien una auténtica economía de la distribución: en sus textos Albers rentabiliza inteligentemente sus ideas, haciendo con ellas inversiones en campos tan diversos entre sí como la creación artística, la conciencia histórica o de lo contemporáneo, la tipografía, la enseñanza del arte, el arte abstracto, el color, el diseño, la arquitectura o el sentido de la existencia. La lectura más desapasionada de esos textos mostrará a cualquiera que la inversión de Josef Albers al reflexionar sobre lo más teórico y sobre lo más práctico a lo largo de su vida no sólo no está amortizada, sino que sigue rindiendo hoy verdaderos dividendos espirituales.

Quizá pueda considerarse a Josef Albers un artista paradigmático en el conjunto del arte moderno y contemporáneo. Pues, en cierto sentido, todo el arte desde las primeras décadas del siglo XX (e incluso desde el impresionismo), puede explicarse como un proceso de economía de la forma o, mejor, de economización de las formas. La abstracción, el principal recurso del arte del siglo XX mucho más poderosa y presente que la intermitencia de los realismos no es otra cosa que un recurso económico de contención y reducción de las partidas de gasto heredadas por el arte de su larga tradición.

Tal y como nos introducen los adalides de esta ejemplar Fundación, Manuel del Junco y Javier Gomá, en el tema, precisamente porque los medios del arte son potencialmente interminables, la posibilidad de usos alternativos también lo es, de modo que todo artista se ve abocado a poner en práctica continuamente el acto fundacional de cualquier economía: el de elegir entre lo valioso y lo que no lo es; cada artista se juega la significación y la visibilidad de su obra en una segunda economía complementaria a la de la producción del arte: la economía de la demanda, la que ejerce el deseo de consumo estético de las obras de arte y también esta ltima tiene reglas distintas a la de la economía de mercado, porque consiste en que determinados bienes muy materiales las obras de arte no se destruyen ni se agotan (a diferencia de los meros bienes de consumo) al ser consumidos a través de la forma más elevada de consumo: la contemplación.

El arte consigue así, segn Albers, el milagro de distribuir posesiones materiales, pero no reduciéndolas, sino multiplicándolas. El arte vendría a producir, como el suceso evangélico, la multiplicación de los panes y de los peces (que están aquí por las posesiones materiales), sólo que su punto de partida no son unos pocos panes y algunos peces que se multiplican para dar de comer a una muchedumbre, sino más bien al revés: miles de posibilidades de formas de panes y peces que, disciplinadamente, son reducidas por cada artista a unas pocas pero que, casi milagrosamente, acaban alimentando a muchos.

La selección de pinturas cubre las principales series en las que Albers trabajó: Variant/Adobe [Variante/Adobe], Structural Constellations [Constelaciones estructurales] y la célebre y ya citada Homage to the Square [Homenaje al cuadrado], realizada en Estados Unidos durante las ltimas décadas de su vida y que muestra la refinada gramática de un artista dedicado a experimentar la interacción de los innumerables matices del espectro del color.

De forma paralela a esta exposición en Madrid, la Fundación Juan March ha organizado una exposición comisariada por Brenda Danilowitz para los museos de Palma (Museu Fundación Juan March, 2 de abril 28 de junio de 2014) y Cuenca (Museo de Arte Abstracto Español, 11 de julio 5 de octubre de 2014) sobre el proceso de trabajo en la obra gráfica de Josef Albers. Su obra gráfica, que Albers desarrolló durante toda su carrera, ofrece la misma idea de economía de la producción, experimentación e innovación que el resto de su obra. La exposición muestra, en una selección de más de cien obras procedentes de la Josef and Anni Albers Foundation, la variedad de técnicas desarrolladas por Albers en su obra gráfica: grabados en hueco, entalladuras, xilografías, litografías y serigrafías.

El catálogo de la exposición, en su ediciones española e inglesa incluye ensayos de Nicholas Fox Weber (Josef Albers: mínimos medios, efecto máximo) y de Jeannette Redensek (Sobre los materiales y técnicas pictóricas de Josef Albers), entre otros. Textos ambos importantes, y especialmente deslumbrante el ltimo, un análisis concienzudo y pormenorizado del trabajo sistemático y riguroso del pintor, que anotaba todos sus pasos, que comparaba todos los elementos, que comprobaba todas las combinaciones y que más allá de su aportación pictórica es ejemplo de intelectual riguroso, auténtico y respetable en un mundo donde nos rodea ña impudicia y la impostura más total: Distribuir las posesiones materiales / es dividirlas / distribuir las posesiones espirituales / es multiplicarlas.. Así opinaba Josef Albers.

Más información

Aproximación a la exposición (del 1 al 10)
Interés: 8
Despliegue: 8
Comisariado: 8
Catálogo: 8
Documentación a los medios: 8
Programa de mano: 8

Fundación Juan March
JOSEF ALBERS: MEDIOS MÍNIMOS, EFECTO MXIMO
Del 28 de marzo al 6 de julio de 2014
Castelló 77, 28006 Madrid
Horario: Lunes a sábado: 11:0020:00 h.. Domingos y festivos: 10:0014:00 h.
Semana Santa: Exposición cerrada los días 17, 18, 19 y 20 de abril.

CONCIERTO INAUGURAL
La exposición se inaugura el viernes 28 de marzo con un concierto, en el que el violinista Miguel Colom y el pianista Dennis Lossev
interpretan obras de Maurice Ravel,
Pablo Sarasate
y John Cage, autor de las
Seis melodías para violín teclado,
dedicadas al matrimonio Albers, y que se oirán en el concierto

CONFERENCIAS EN TORNO A JOSEF ALBERS
Con motivo de esta exposición, en la primera semana de abril se ha programado en la Fundación Juan March el ciclo En torno a Josef Albers.
*El martes 1 de abril, José Francisco Yvars: Josef Albers: caleidoscopio. Enigmas del color.
*El jueves 3 de abril, Laura Martínez de Guereñu: Josef Albers y España. Un antes y un después.

LA OBRA GRFICA DE ALBERS EN LOS MUSEOS DE LA FUNDACIÓN JUAN MARCH
*Museu Fundación Juan March, Palma
2 de abril- 28 de junio de 2014
*Museo de Arte Abstracto Español, Cuenca
11 de julio- 5 de octubre de 2014.


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