guía cultural

Por el muro incierto de Pello Irazu

José Catalán Deus | Miércoles 11 de febrero de 2015

La Sala Alcalá, 31 acoge al escultor vasco Pello Irazo. El muro incierto es una instalación gigante que ocupa al completo el enorme espacio disponible, formada por nueve creaciones de distintas épocas ya expuestas y dos novedades. Una antología que conforma una nueva propuesta. Curiosa y hasta divertida, puede verse en familia: los niños lo pasarán bien. Este muro no es el de Berlín, ni el de Palestina, su trazado es tan incierto, que conforma un laberinto inaccesible a la razón, poblado de ángulos insensatos.

La Comunidad de Madrid hospeda al artista, que utiliza variados formatos, materiales y dispositivos, y especialmente realiza un gran despliegue de pintura mural, con ocasión de la feria anual ARCO que se inicia en unos días. Las obras que conforman El muro incierto son: Historia Natural (1991), Summer Kisses (1992), A la maison (1995), La esquina (1995), Meeting Point (1997), The Wound (1998), 330 (1998), Life Forms 2 (2001), Per la Rosa (2002), Serie B (Ercilla) (2004) y NMT (2015). La primera nunca se ha expuesto en anteriores exposiciones individuales del autor, y la ltima ha sido creada específicamente para la planta superior de la sala: no dejen de subir para contemplar el conjunto de este muro zigzagueante desde lo alto.

Siendo una propuesta integrada no es caso de comentar aisladamente las distintas obras ensartadas; la escultura de Pello Irazu da así un paso extremadamente abierto, hasta superar el género y englobarlo en un instalacionismo de grandes dimensiones, formando un laberinto multicolor e incomprensible en el que objetos escultóricos, arquitectónicos, gráficos y sonoros aparecen de improviso. En el centro del laberinto, el minotauro es una casita inofensiva en la que no se puede entrar.

El montaje establece ciertamente un dialogado artístico con el magnífico espacio donde mora, obra del arquitecto Antonio Palacios, interrumpido con la guerra civil y concluido en 1943. Irazu considera que esta configuración espacial laberíntica a base de muros que más allá de ser soportes de la obras, constituyen un todo expresivo, junto con las peculiares características de esta sala de exposiciones, permite diferentes aproximaciones y experiencias espaciales. El visitante puede experimentar el lugar como un espacio donde contenido y contenedor, y arquitectura, escultura y pintura, se relacionan en un juego muy particular que le hará reflexionar sobre la manera habitual de sentir el espacio y la forma.



Pello Irazu, nacido en Andoain (Guipzcoa) en 1963, en 1990 fue seleccionado para participar en el Aperto de la Bienal de Venecia y también recibió la prestigiosa beca Fullbright del Comité Conjunto Hispano-Norteamericano para desarrollar su trabajo en Nueva York, donde residió hasta 1998. A partir de ese año vive y trabaja en Bilbao. Su propuesta es accesible y su mensaje sencillo. Es un decorado sorprendente en medio de la banalidad, alimento estético y combustible de reflexión. Mensaje directo, sin intermediarios innecesarios, sin superflua alharaca.

Aproximación a la exposición (del 1 al 10)
Interés: 7
Concepto: 7
Despliegue: 8
Comisariado: n/h
Catálogo: n/v
Documentación a los medios: 6
Programa de mano: n/v


Sala Comunidad de Madrid-Alcalá 31
El muro incierto de Pello Irazu
Del 12 de febrero al 19 de abril
-Encuentro con el artista el jueves 12 de febrero, a las 19:00, en la propia Sala
-A partir del 19 de febrero, todos los jueves (salvo el 19 de marzo y el 2 de abril, que son festivos) se realizarán visitas guiadas a la muestra, a las 19:00. Y, con motivo de la celebración de ARCOmadrid 2015, habrá una visita extraordinaria el sábado, 28 de febrero, a las 12:00. La duración de estas visitas será de unos 50 minutos (aproximadamente) y están recomendadas para mayores de 13 años. El acceso es gratuito, pero con aforo limitado, por lo que es imprescindible inscribirse con antelación. Puede solicitarse información a través del correo [emailprotected]