guía cultural

Benamor, recuperación voluntariosa pero cuestionable

José Catalán Deus | Viernes 16 de abril de 2021

Pasarse de promoción puede ser contraproducente. Demasiadas expectativas decepcionan si la dicha no es la prometida. La opereta Benamor de Pablo Luna no pasa de revista convencional, una pieza muy caduca cuya insignificancia se agudiza intentando actualizarla. Un banal divertimento para forofos del género.

Colabora especialmente a la decepción la actualización del libreto por parte de Enrique Viana, un conjunto de chascarrillos sin más gracia que la que un pblico nada exigente y todo entregado quiera dale, la cual solo causa un alargamiento artificial del espectáculo en veinte minutos plomizos repartidos en dos parlamentos lamentables. Tenemos serias dudas de que an respetando al original libreto, la obra hubiera merecido ser desempolvada, pero con este agravante, decididamente no lo ha sido.

El aragonés Pablo Luna Carné (1879-1942) fue un prolífico compositor de revista, opereta y zarzuela, que tuvo un gran éxito con El niño Judío y lo repitió en 1923 con esta Benamor, de la que dice, sin tener que ir más lejos, la Wikipedia: Una larga y bella partitura, con una orquestación magistral, de una gran riqueza armónica con presencia de elementos corales y danzantes, en la que habría que destacar momentos melódicos de gran belleza, una de esas obras cuyo éxito se debió a una hermosa partitura y no tanto al libreto, que ha dejado una serie de momentos en el recuerdo colectivo y en todas las grandes voces de la zarzuela española como Junto al mirador, la canción española, País del sol, o la romanza que canta el personaje Juan de León, Por una mujer, una de las grandes aportaciones de la opereta española.

Muy exagerado ditirambo. Sobre un libreto demencial al que no se le puede pedir la menor coherencia -una niña se cree hombre y un niño es toda una mujer hasta su madurez sin que ni ellos ni nadie se den cuenta-, Luna compone una partitura comercial enhebrando melodías de la época, correcta pero limitada. Solo hay que recordar el impacto que produce la breve incursión en el inicio de Así habló Zaratustra de Richard Strauss, la célebre ambientación de 2001, una odisea en el espacio, en relación a lo que durante la pieza se viene oyendo. Libreto y partitura pueden aprobarse y hasta disfrutarse como mero pasatiempo por el pblico más veterano, pero todo ello no pasa del aprobado general y generoso.

Enrique Viana da el gran salto de su carrera haciéndose cargo de versionar el libreto y dirigir la escena, además de interpretar a un personaje importante -Abedul- y a los nefastos introductores a la obra, un pastelero y su señora de infausto recuerdo. En lo primero, no vamos a insistir, son chocarreras y contraproducentes las referencias a la actualidad. En lo segundo, se apoya en el buen hacer escenográfico de su cómplice Daniel Bianco -el director del Teatro de la Zarzuela- y el cumplimiento notable del vestuario de Gabriela Salaverri y la iluminación de Albert Faura. Esta vez, las coreografías de Nuria Castejón francamente nos decepcionaron, un batiburrillo de estilos pegado con cola. Ciertamente la puesta en escena nopasa de realismo pintoresco pero está bien montada si se acepta el planteamiento.

Viana recitaba en 2010 en el regularcillo Poeta en Nueva York montado por Blanca Li en los Teatros del Canal (ver nuestra reseña) y fue tenor bufo en Las Bodas de Fígaro que repuso el Teatro Real en 2011 (ver nuestra reseña). En la similar a esta Benamor pero superior zarzuela La Corte del Faraón, también escenografiada por Daniel Bianco en 2014, participó en el reparto (ver nuestra reseña) y estuvo en otra opereta similar, Luna de miel en El Cairo, en este mismo teatro en 2015 (ver nuestra reseña), así como en 24 horas mintiendo! en 2018 (ver nuestra reseña) y en la superior a todas ellas adaptación musical de Tres sombreros de copa en 2018 (ver nuestra reseña), especializándose cada vez más en estos papeles de mujer y mariquita que tanto gustan a los pblicos añejos y tan extravagantes resultan hoy día.

No puede decirse que no hayamos dedicado atención a su trayectoria, pero queríamos estar seguros de que estamos ante un salto en el vacío.

En general, el primer acto resultó desastroso y la pieza mejoró a partir del intermedio. La dirección musical de José Miguel Pérez-Sierra fue llevadera, comenzado desastrosamente, con la orquesta desafinando y tapando a los cantantes, pero mejorando conforme llegábamos al ansiado final. No estuvo mucho mejor el coro hasta los prolegómenos, y tampoco nos es posible explayarnos con bailarines y actores. En conjunto fue un espectáculo anticuado sin la calidad que hoy resulta exigible.

Quizás las voces fueran lo más resaltable. Vanessa Goikoetxea hizo esa difícil princesa hembra-varón con acierto vocal y discutible actuación, reconociendo sin duda lo difícil del estrambótico personaje. Carol García se hizo cargo con dominio del sultán varón-hembra, y Juan de León las acompañó gallardamente como ese caballero español tan inaudito en estos tiempos. Muy bien Irene Palazón como Nitetis, y patéticos Gerardo Bullón y Gerardo López en esos dos papeles imposibles, los de los príncipes de Kabul y de Florelia. Acertado Enrique Viana como Gran Visir (abandone usted por favor los papeles de marusón y señorona), y los dos Sánchez -Francisco y Emilio- como Alifafe y Babilón.

En fin, un mero entretenimiento en el mejor de los casos, abusivamente largo -dos horas y media-, que nos hace recordar que a menudo el paso del tiempo es el mejor administrador de famas y méritos. El pblico del estreno se mostró maravillado, lo aplaudió y lo rió todo como portento nunca visto, y se mostró fiero guardián del género, pongan lo que pongan y si es lo más tópico y desfasado, an mejor.

VALORACIÓN DEL ESPECTCULO (del 1 al 10)
Interés: 5
Dirección musical: 6
Dirección artística: 6
Voces: 7
Orquesta: 6
Coro: 6
Escenografía: 7
Producción: 6
Programa de mano: 6
Documentación a los medios: 8

Teatro de la Zarzuela
Benamor
OPERETA EN TRES ACTOS
14, 15, 16, 17, 18, 21, 22, 23, 24 y 25 de abril de 2021
Msica Pablo Luna
Libreto Antonio Paso y Ricardo González del Toro,
Versión de Enrique Viana
Estrenada en el Teatro de la Zarzuela el 12 de mayo de 1923
NUEVA PRODUCCIÓN DEL TEATRO DE LA ZARZUELA

Equipo artístico
Dirección musical José Miguel Pérez-Sierra
Dirección escena Enrique Viana
Escenografía Daniel Bianco
Vestuario Gabriela Salaverri
Iluminación Albert Faura
Coreografía Nuria Castejón

Ayudante de dirección de escena Carlos Roó
Ayudante de escenografía Carmen Castañón
Ayudante de vestuario Mónica Teijeiro
Ayudante de iluminación Alfonso Malanda
Maestros repetidores Lillian Castillo, Ramón Grau

Reparto

BENAMOR (PRINCESA Y HERMANA(O) DE DARÍO)
Vanessa Goikoetxea (14, 16, 18, 22 y 24 de abril)
Miren Urbieta-Vega (15, 17, 21, 23 y 25 de abril)

DARÍO (SULTN Y HERMANO(A) DE BENAMOR)
Carol García (14, 16, 18, 22 y 24 de abril)
Cristina Faus (15, 17, 21, 23 y 25 de abril)

NITETIS (ODALISCA) Irene Palazón
PANTEA (MADRE DE LA PRINCESA Y DEL SULTN) Amelia Font
ABEDUL (GRAN VISIR) / CONFITERO / PASTELERA / COMERCIANTE / SU MUJER) Enrique Viana

JUAN DE LEÓN (CABALLERO ESPAÑOL)
Damián del Castillo (14, 16, 18, 22 y 24 de abril)
César San Martín (15, 17, 21, 23 y 25 de abril)

RAJAH-TABLA (PRÍNCIPE DE KABUL) Gerardo Bullón
JACINTO / EUNUCO / ELOHIM (PRÍNCIPE DE FLORELIA / SERVIDOR / SACERDOTE) Gerardo López
ALIFAFE (GUARDIA) Francisco J. Sánchez
BABILÓN (TRAFICANTE) Emilio Sánchez
CACHEMIRA (ODALISCA) Esther Ruiz

ACTORES-FIGURANTES Ariel Carmona, Rafael Delgado, Luis Maeso, lex Parra
BAILARINES David Acero, Marian Alquézar, Cristina Arias, José ngel Capel, Alberto Ferrero, Francisco Guerrero, Olivia Juberías, María López, Daniel Morillo,

Orquesta de la Comunidad de Madrid
(Titular del Teatro de la Zarzuela)
Coro Titular del Teatro de la Zarzuela
Director Antonio Fauró

Horario: 20:00 h (domingos, 18:00 h).