guía cultural

De Posada a Isotype, de Kollwitz a Catlett… ¿Y?

José Catalán Deus | Martes 22 de marzo de 2022

El MNCARS, o sea el Museo Reina, ofrece un sensacional despliegue de realismo socialista en su versión mexicana y alemana. Ese arte comprometido del siglo pasado que abrazó la causa revolucionaria con una vehemencia mal aprovechada; pero que, aunque fracasara -por fortuna probablemente-, sigue manteniendo un empuje conmovedor y unos méritos innegables.

La exposición crípticamente titulada De Posada a Isotype, de Kollwitz a Catlett está dedicada a la evolución del arte gráfico y su papel como herramienta política durante la primera mitad del siglo XX en Alemania y México. Se trata de una técnica que, sin haber gozado de una gran preeminencia en la historiografía tradicional por su carácter anacrónico y antitecnológico -dibujo, grabado, caricatura, ilustración- sirvió de potente herramienta propagandística de la que la izquierda supo extraer todo su potencial.

Ocupa nueve salas divididas en cuatro grandes secciones y rene 450 obras realizadas con xilografía, punta seca, linóleo, litografía, y otras técnicas. Se inicia, tal como nos informa notablemente el dossier de prensa, con las dos grandes figuras del grabado de finales del siglo XIX y principios del XX que se convirtieron en referentes ineludibles en el desarrollo posterior del arte gráfico: el mexicano José Guadalupe Posada y la alemana Käthe Kollwitz. La segunda sección está dedicada al expresionismo alemán y concretamente a la producción gráfica de autores del país germano como Max Beckmann, Otto Dix y George Grosz después de la Primera Guerra Mundial, en la que el grabado se constituyó como un lenguaje propio de la nación alemana moderna,
diferente del cubismo francés y el futurismo italiano. La tercera, la más amplia de todas, aborda la labor del Taller de Gráfica Popular (TGP) de México, un colectivo fundado en 1937 en el que participaron artistas de varios países, entre ellos el mexicano Leopoldo Méndez, el suizo Hannes Meyer o la estadounidense Elizabeth Catlett. A través de su ingente producción de folletos, carteles, panfletos y grabados, este grupo contribuyó al fortalecimiento de formaciones políticas revolucionarias. La ltima sección, abandonando ya el arte panfletario, se ocupa del proyecto Isotype (International System of Typographic Picture Education) de los austriacos Otto Neurath y Marie Reidemeister-Neurath y el alemán Gerd Arntz, una iniciativa que adquirió un gran reconocimiento internacional como medio de diseñográfico para formular un lenguaje de signos funcional a nivel global.

La exposición comienza pues con una sala en la que se confronta el trabajo de José Guadalupe Posada (1852-1913, México) y de Käthe Kollwitz (1867-1945, Alemania), quienes ejercieron una enorme influencia en las generaciones posteriores de artistas gráficos políticos de México, Estados Unidos, la Unión
Soviética y China. Posada realizaba mordaces caricaturas políticas, anuncios y viñetas en el contexto de la Revolución mexicana, mientras que la obra de Kollwitz adoptaba una cariz socialista y feminista en la Alemania de su época.

Posada, considerado como un gran caricaturista, trabajó en Ciudad de México como ilustrador para editoriales que difundían periódicos como la Revista de México y La Patria Ilustrada así como panfletos destinados a un pblico mayoritariamente semianalfabeto. El artista produjo miles de imágenes y en muchas de ellas partía de uno de los iconos más comunes de México,
el esqueleto y la calavera, como puede observarse en sus obras expuestas, entre ellas los grabados Calavera las bicicletas (ca. 1900) o La Calavera Oaxaqueña (1903). Las infinitas variaciones de Posada sobre las luchas existenciales y sociales de las calaveras hicieron que su imaginería fuera muy popular a nivel local y que despertara a nivel internacional la atención de críticos expresionistas como los alemanes Ernst Toller y Paul Westheim, y otras figuras como Sergei Eisenstein y André Breton. Además, se convirtió en la figura fundacional para los artistas mexicanos que, como Diego Rivera, reclamaban una auténtica genealogía del arte mexicano.

Por su parte, Käthe Kollwitz, criada en una familia de fuertes convicciones socialistas, trató de continuar la tradición realista más depurada de las artes gráficas para representar la vida social de las mujeres y la clase trabajadora del Berlín de principios del siglo XX. Tras una serie de autorretratos, la exposición muestra sus conjuntos de grabados La revuelta de los tejedores (1893-1897) y La guerra de los campesinos (1908), un porfolio que fue considerado como uno de los ciclos gráficos más destacados del siglo XX por su reivindicación de la justicia social. La muerte de su hijo menor a principios de la Primera Guerra Mundial motivó su tercera gran obra, Guerra (1918-1923), donde reemplazó la agitación política por la oposición feminista y el duelo, convirtiéndose en una ardiente pacifista y en una gran crítica de las condiciones de vida y las funciones sociales de las madres proletarias.

El expresionismo alemán

La segunda sala de la muestra está dedicada a la producción gráfica alemana después de la Primera Guerra Mundial y, de forma específica, a la obra realizada por artistas como Max Beckmann (1884-1950), Otto Dix (1891-1969) y George Grosz (1893-1959), tres de los pintores postexpresionistas más destacados de Alemania. Entre 1919 y 1924 estos autores realizaron diferentes grabados donde reflejaron, cada uno con su impronta particular, los traumas de la Primera Guerra Mundial en Alemania, sus críticas al capitalismo y su oposición al resurgimiento militarista y al nacionalismo germano.

Así, la carpeta de once litografías tradicionales Die Hlle (Infierno, 1919) de Beckmann retrata de forma caustica la decadencia de la vida y el arte del orden burgués, como puede apreciarse en las litografías Los ideólogos, El hambre o La noche. En las nueve fotolitografías de impresión barata Gott mit uns (Dios con nosotros) (1920) -cuyo título proviene de la divisa de la hebilla del cinturón de los soldados germanos- Grosz presenta una leyenda en alemán, inglés y francés, con diversos mensajes que ridiculizan las conexiones entre el capitalismo y militarismo en Alemania y que le costaron ser juzgado por difamación del ejército. Con mayor crudeza, la obra de Dix Der Krieg (La guerra, 1924), carpeta compuesta por cincuenta impresiones publicadas con motivo del décimo aniversario del inicio de la Gran Guerra, refleja, al estilo de Goya, los enormes horrores del conflicto.

El Taller de Gráfica Popular

La tercera y más extensa sección de la exposición, desplegada en seis salas, se centra en el Taller de Gráfica Popular (TGP) de México, un país en el que, tras el proceso revolucionario iniciado en 1910, se explotaron a fondo las ventajas del medio gráfico como herramienta de propaganda y agitación. La primera de estas salas muestra el trabajo de los fundadores de este colectivo -uno de los gremios más representativos y exitosos de la historia universal del arte gráfico-, creado en 1937: Ral Anguiano (1913-2006), Luis Arenal (1908-1985), Leopoldo Méndez (1902- 1969), Pablo O Higgins (1904, EE.UU.-1983, México), ngel Bracho (1910-2005) y Alfredo Zalce (1908-
2003).

La constitución del Taller se llevó a cabo en el seno de la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios (LEAR); se reunían semanalmente para tratar de forma democrática los temas de interés, definir qué organizaciones del movimiento obrero necesitaban apoyo y si el grupo estaba dispuesto a colaborar con ellas y de qué forma. La producción de una gran cantidad de folletos, carteles, panfletos y grabados por parte de este colectivo contribuyó al fortalecimiento de formaciones políticas izquierdistas que respaldaban causas como la nacionalización de los recursos mineros y petroleros o los derechos a la tierra de las poblaciones indígenas, y se enfrentaban a la expansión del fascismo.

La siguiente sala se detiene con más detalle de la obra de Leopoldo Méndez, miembro destacado del Taller, dedicándose exclusivamente a partir de entonces al trabajo en grabado con la intención de que sirviera de instrumento popular de las amplias reformas del gobierno posrevolucionario. Su estilo de rasgo vigoroso, inspirado en el legado de José Guadalupe Posada, como puede observarse precisamente en Posada en su taller (Homenaje a Posada) (1953) o en Deportación a la Muerte (Tren de la muerte) (1942), así como su fuerte dominio de la composición marcaron la línea artística del TGP durante mucho tiempo.

El siguiente espacio de esta sección se ocupa de la aportación realizada al TGP por exiliados procedentes de Europa que huían del ascenso del fascismo. En 1938, Heinrich Gutman, que había ocupado cargos directivos en la LEAR como redactor responsable de la revista Frente a Frente, funda la Liga Pro Cultura Alemana que organizó en 1939 una serie de conferencias sobre el nazismo y el fascismo, que se anunciaron mediante carteles realizados por los artistas
más activos del TGP de la época. Algunos ejemplos que pueden verse aquí son los trabajos de Leopoldo Méndez y Luis Arenal, que representaron el aparato propagandístico del fascismo alemán; o Isidoro Ocampo (1910-1983), que contribuyó con sendas imágenes sobre el antisemitismo, el fascismo en Japón y en España con un retrato de Franco en compañía de una calavera.

En la cuarta sala dedicada al TGP se destaca el trabajo del suizo Hannes Meyer (1889-1954), director de la Bauhaus en Dessau entre 1927 y 1930, que llegó a México en 1939, donde permaneció 10 años. Su temprana vinculación con la Liga Pro Cultura Alemana derivó en su nombramiento como director del TGP entre 1940 y 1943, y de nuevo entre 1946 y 1949. Entre los diversos trabajos editoriales que desarrolló, en 1943 se publicó, bajo su dirección artística, El libro negro del terror nazi en Europa, una importante edición de la que puede verse un ejemplar- que incluye imágenes realizadas por 22 artistas del TGP. También figuran aquí obras de otros miembros del TGP como, entre otros, Ignacio Aguirre (1900-1990), Alberto Beltrán (1923-2002), Jess Escobedo (1918-1978), Adolfo Mexiac (1927-2019), Fernando Pacheco (1918-2013), Mariana Yampolsky (1925, EE.UU.-2002, México) o Alfredo Zalce.

Por otro lado, debido a los vínculos del TGP con el movimiento sindicalista de los Estados Unidos y de México, entre 1945 y 1947 varios artistas estadounidenses, entre ellos Elizabeth Catlett (1915, EE.UU.-2012, México), se sumaron al TGP. Inspirada por la recién publicada carpeta del TGP Estampas de la Revolución Mexicana (1947), Catlett creó su primer porfolio de quince
linóleos, I am the Black Woman, una obra que puede verse -en parte- en la quinta sala dedicada al TGP y que está basada en grabados populares y fotografías de heroínas afroamericanas. Aunque Käthe Kollwitz ya era una referencia para ella, la cultura gráfica del TGP hizo que se replanteara sus concepciones iniciales y terminara fusionando la mexicanidad con las versiones europea y estadounidense del realismo social.

Junto a ella, en este mismo espacio, el visitante puede contemplar obras de otros artistas también afroamericanos como Margaret Taylor Burroughs (1915-2010), John Woodrow Wilson (19222015) y Charles White (1918- 1979), muy comprometidos política y socialmente y que se refugiaron en México durante la represión política y racial de la era McCarthy. En cuanto a White, que estudió con Grosz en Nueva York, fue marido de Catlett, con quien se desplazó a México en 1947 y participó brevemente en el Taller. De él puede observarse una selección de diez obras donde se aprecia la calidad artística de este autor.

La ltima de las salas, la sexta, dedicada a la producción del TGP, muestra trabajos ya realizados en la década de los 50 por miembros del colectivo como Mariana Yampolsky, Lorenzo Guerrero, Celia Calderón de la Barca (1921-1969) o Andrea Gómez (1926-2012), por citar algunos, en una época en la que tuvieron lugar numerosas exposiciones del Taller y de sus integrantes en el extranjero gracias a las que el TGP vivió años de singular apogeo. Los proyectos colectivos y la creación de carteles referentes a temas políticos fueron disminuyendo paulatinamente, con excepción de las calaveras, un género de gran aceptación popular que convirtió en un clásico del TGP.

El proyecto Isotype

La exposición concluye con una sección que presenta extensa documentación gráfica del proyecto Isotype que empezó tras la Primera Guerra Mundial y que supuso un giro en la aplicación de las técnicas de impresión para la acción política. Tras el realismo social de Kollwitz o la caricatura política del expresionismo alemán, las figuraciones de los alemanes Franz Wilhelm Seiwert (1894- 1933) y Gerd Arntz (1900-1988), identificadas al principio como constructivismo figurativo, contribuyeron a la evolución del proyecto Isotype. Concebido por Otto Neurath (1882-1945), Marie Reidemeister- Neurath (1898-1986) y el propio Gerd Arntz, este proyecto fue desarrollado en diversas fases y sedes (Dsseldorf, Viena, Mosc, La Haya y Londres) y adquirió reconocimiento internacional rápidamente como medio ideal para formular un lenguaje de signos verdaderamente internacional, funcional y universalmente legible. Su objetivo era transmitir información sociológica, económica y política crucial para las clases trabajadoras de los Estados nacionales tradicionales, así como para los Estados poscoloniales emergentes del periodo de entreguerras y de la Segunda Guerra Mundial con formas de comunicación internacional y principios de diseño gráfico para lograr una legibilidad y funcionalidad verdaderamente global.

El despliegue de imágenes y sugerencias es impresionante, porque no basta con pasear una mirada superficial por el conjunto, sino que como ocurre raras veces cada una de las 450 obras expuestas merece detenerse ante ella, dice cosas, transmite vida, tiene interés y a menudo admira. Es un arte realista sinm pretensiones conceptuales ni sugerencias intelectualizadas, para que la gente corriente lo entendiera a la primera. Fue arte de batalla al servicio de determinadas ideas, pero conforma una muestra an vigorosa, plena de vida, un retrato de sufrimientos y anhelos colectivos que todavía tiene vigencia.

Aproximación a la propuesta (del 1 al 10)
Interés: 8
Despliegue: 8
Comisariado: 8
Catálogo: n/v
Documentación a los medios: 8

Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
De Posada a Isotype, de Kollwitz a Catlett
22 de marzo de 2022 29 de agosto de 2022

LUGAR: Edificio Sabatini, 3 planta
ORGANIZACIÓN: Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
COMISARIADO: Benjamin H.D. Buchloh y Michelle Harewood
COORDINACIÓN: Rafael García y Carlos González
ACTIVIDADES PARELAS: Encuentro con Benjamin Buchloh y Michelle Harewood .De Posada a Isotype, de Kollwitz a Catlett Miércoles 23 de marzo, 2022 18:00 h. Edificio Nouvel, Auditorio 200.