La década de los años noventa en Japón se conoce como «los años perdidos»: la crisis financiera de 1989 y el estallido de la burbuja económica ralentizaron el crecimiento de la sociedad, que ejercía una enorme discriminación hacia la mujer; y el mundo de la fotografía no era diferente. La retrospectiva toma su título de la novela de Francis Scott Fitzgerald ‘Tender is the Night’, publicada en 1934, por alguna razón que no nos cuentan. Sus desnudos se alternan con otras imágenes de animales, naturalezas muertas -especialmente flores-, vistas de ciudades, interiores de habitaciones de hotel, fenómenos atmosféricos, luces y reflejos en movimiento. Escenas que el espectador puede intuir, quizás cargadas de sentidos alegóricos como nos dice el comisario, lo transitorio de las cosas, la fugacidad de los instantes y, en definitiva, el transcurrir de la vida. Nomura evita llevar un orden cronológico que agrupe sus obras. Esta es la razón por la que el recorrido expositivo se ordena siguiendo sus fotolibros.
Night Flight (Vuelo nocturno) es un fotolibro de 2008. Se trata de una de sus pocas publicaciones en color, en la que alterna fotografías de hombres desnudos tumbados en camas de habitaciones de hoteles oscuras, mirando a la cámara, fumando o junto a sus parejas, jóvenes que suelen ser conocidos o amigos suyos, a quienes invita a que se desnuden en habitaciones de hoteles o en los dormitorios de sus casas, cuyas imágenes alterna con las de aviones despegando o aterrizando, luces nocturnas desenfocadas, chimeneas industriales humeantes y fuegos artificiales. Gran parte de los motivos que Sakiko Nomura fotografía evocan el vínculo intrínseco que existe entre la vida y la muerte. Y no solo los motivos, las puestas en escena de sus composiciones, la oscuridad de la atmósfera, la monotonía de las tonalidades sugieren la frialdad de la muerte, como si a pesar de la contención de sus obras, estas expresaran misterios ocultos de ternura e intimidad. Es el caso de la sección ‘Flowers’, sus series de flores. Orquídeas, azucenas, rosas, crisantemos, flores en descomposición en jarrones en medio de una estancia, una extensión de las vánitas barrocas, alegorías de la fugacidad de la existencia, siendo su belleza puramente transitoria.
Black Darkness (Oscuridad negra; 2008) hace referencia a un término budista que se relaciona con el infierno, y este fotolibro se compone de imágenes de desnudos masculinos, rascacielos entrevistos en la niebla, dormitorios vacíos, flores, la espuma de las olas del mar, todo ello en blanco y negro. Son fotografías muy oscuras que generan distintos
significados oníricos y emociones casi ancestrales. ‘Nude, A room, Flowers’ (Desnudo / una habitación / flores; 2012) incluye algunas fotografías en color y amplía el vocabulario de Nomura con imágenes de sus viajes por distintas ciudades —como Venecia, Berlín, Pekín o Cracovia—, así como con interiores de hospitales y de iglesias, cementerios y alguna escasa vista diurna. Por su parte, ‘Fate in spring’ (El destino en primavera; 2020) le permite presentar imágenes dobles, solapadas, y no necesariamente relacionadas entre sí, que al unirse suscitan ideas inesperadas.
En el año 2016, tras pasar por los Encuentros de fotografía de Arlés, Nomura publicó su primera experiencia con fotografías solarizadas impresas con tinta negra brillante sobre papel negro mate bajo el título ‘Another Black Darkness’ (Otra oscuridad negra). Oscura y hermética a primera vista, el espectador se encuentra, ahora
sí, implicado de forma imperativa en el acto de la contemplación de esta serie sin título ni fecha concreta, pues debe hacer un esfuerzo considerable por descifrar el contenido, prácticamente oculto, de estas imágenes, que hacen que las formas captadas por la mirada se asemejen a paisajes que parpadean en el fondo de la memoria; una serie que representa el aspecto más reflexivo y analítico de la obra de Nomura. Y finalmente, en el fotolibro ‘Majestic’ (Majestuoso), publicado en 2022, imágenes de hombres tatuados pertenecientes a la asociación Edo-choyukai en su peregrinación anual al monte Oyama, una gota de realismo en un riachuelo onírico.
También se incluye al final una selección de fotografías realizadas en Granada el verano pasado para esta exposición. Doce imágenes que podían ser de Pernambuco: un hombre desnudo en la penumbra de una habitación -también de rasgos orientales, quizás su acompañante, un cruce de autovías, un cementerio, las mismas sobras y reflejos de siempre. No sabemos lo que ve Sakiko Nomura cuando mira, pero cuando fotografía lo que ve es sombrío.
Aproximación a la propuesta (del 1 al 10)
Interés: 6
Despliegue: 6
Comisariado: 7
Catálogo: 8
Programa de mano: n/v
Documentación a los medios: 7
Fundación MAPFRE
Sakiko Nomura. Tierna es la noche
Del 6 de febrero al 11 de mayo de 2025
Comisario: Enrique Juncosa.
Paseo de Recoletos, 23. Madrid
Tlf. 91 5816100
cultura@fundacionmapfre.org
PRECIO DE LA ENTRADA
Entrada general: 5 €
Entrada gratuita los lunes (no festivos): 14.00-20.00 h
HORARIOS
Lunes: 14.00-20.00 h
Martes a sábado: 11.00-20.00 h
Domingos y festivos: 11.00-19.00 h.