Esta obra es una pieza esencial para comprender a los alemanes, tan lejanos de nosotros. Bertolt Brecht se lo debe todo a ella, y en su estudio generalizado por sucesivas generaciones alemanas radica parte de esa idiosincrasia incomprensible que dio lugar al nacionalsocialismo y también a muchas cosas buenas. Una obra romántica, un panfleto décimonónico, un juvenil lirismo inmaduro e inconcluso al que sin embargo no se le puede negar capacidad de fascinación, abyecta belleza y elementos de irracionalidad subconsciente que luego dominarían la escena hasta hacerse triviales. Merece admiración cómo los alemanes han reverenciado a Bchner y tristeza el pensar cuántos Bchner habremos pisoteado por estos lares.
Dado que Woyzeck es un punto de partida, -como dice Vera- una investigación teatral que nunca termina, un discurso abierto a mltiples interpretaciones, un relato que un director puede iluminar a partir de miles de lecturas, todas válidas probablemente, esa versatilidad hace de la pieza codiciado objeto de deseo para muchos directores. Vera ha elegido resaltar que por primera vez en la escena denuestro tiempo, un dramaturgo nos presenta en escena un personaje cuya tragedia cotidiana desborda los propios recursos que tiene para expresarla. Más que la opresión que sufre el soldado, más que la locura a la que le conducen los otros, lo que va a definir este personaje es la imposibilidad de encontrar un lenguaje para entenderse y entender el mundo.
La escenografía de Max Glaenzel y Estel Cristià, apoyada en la iluminación de Juan GómezCornejo y el vestuario de Alejandro Andjar, es de lo mejor que recordamos. Ese bosque estilizado de tallos cimbreantes y ese piano misterioso inspirado en Bela Bartok consolidan una atmósfera misteriosa que podía haber empleado algn elemento más para diferenciar cuartel, cantina, vivienda y ciénaga, especialmente esta ltima, de enormes sugerencias si contara con mayor presencia.
Bchner murió a los 23 años, en 1837. Fue socialista utópico y agitador campesino, también partidario de la unificación alemana. Esta obra se basa en la historia real del soldado Woyzeck, que asesinó a su amante en Leipzig en 1821: inacabada, sus fragmentos estaban diseminados en diversos manuscritos y se desconoce su final. Las obras teatrales de Bchner comenzaron a representarse ya entrado el siglo XX y a partir de entonces ocupa un lugar prominente en el repertorio del teatro mundial. El compositor Alban Berg se basó en la obra de Bchner para crear su ópera Wozzeck, estrenada en 1925.
Con Woyzeck, Gerardo Vera presenta una inteligente réplica a la Ascensión y caída de la ciudad de Mahagonny, tanto a la versión teatral de Mario Gas como incluso a la ópera de Kurt Weill recientemente programada por Gérard Mortier en el Teatro Real. No sabemos si es un canto de despedida de su larga andadura en el CDN, pero en todo caso es una importante aportación. Lo nico que lamentamos, como siempre, es que tanto y tan buen trabajo siempre sea destinado a causas foráneas ya consagradas y nunca o casi nunca a limitar nuestro ignorante desdén por tantos autores y títulos españoles de todos los hoy y de todos los ayeres, que merecen reposiciones cuidadosas y revisiones al alza.
Calificación del espectáculo (del 1 al 10)
Texto original, 7
Adaptación, 7
Dirección, 8
Interpretación, 8
Realización, 8
Producción, 9
Woyzeck
de Georg Bchner
Versión
Juan Mayorga
Dirección
Gerardo Vera
Equipo artístico
Versión Juan Mayorga
Dirección Gerardo Vera
Escenografía Max Glaenzel y Estel Cristià
Iluminación Juan GómezCornejo
Vestuario Alejandro Andjar
Msica Luis Delgado, Mariano Marín
(sobre temas de Béla Bartók)
Diseño de sonido y efectos Roc Mateu
Movimiento escénico y coreografía Chevi Muraday
Caracterización Eva Fernández
Ayudante de dirección José Luis Arellano
Ayudante de escenografía Silvia de Marta
Ayudante de iluminación David Hortelano
Ayudante de vestuario Carmen Mancebo
Reparto (por orden alfabético)
Soldado 2 Jon Bermdez
Soldado 1 Críspulo Cabezas
El tonto Helena Castañeda
Woyzeck Javier Gutiérrez
Vecina Trinidad Iglesias
Soldado 3 Andoni Larrabeiti
Pianista Mariano Marín
Tambor mayor Markos Marín
Andrés Chani Martín
Capitán Jess Noguero
Doctor Helio Pedregal
Marie Lucía Quintana
Suboficial Sergio Sánchez Shaw
Charlatana/Puta Marina Seresesky
Niña 2 Sara Sierra
Vieja Ana María Ventura
Niña 1 Marita Zafra
Producción, Centro Dramático Nacional
11 de marzo a 22 de mayo de 2011
De martes a sábados, a las 20.30 h
Domingos, a las 19.30 h
Teatro María Guerrero
C/ Tamayo y Baus, 4
28004 Madrid.